NO es necesario disponer de una amplia parcela en el exterior de la vivienda para tener un Mini jardín, aunque parezca contradictorio. En los alrededores de la casa, existen una gran variedad de espacios que pueden ser aprovechables para el diseño de jardines y el cultivo de plantas ornamentales; azoteasy terrazas, alféizares de ventanas, verjas de los balcones o las fachadas de los patios…
Utilizando nuestra imaginación y poniendo muchas ganas, podremos lograr resultados espectaculares en el diseño y construcción de nuestro Paisaje.
Elementos en el Mini Jardín
Todos los elementos mencionados pertenecen a la fisonomía de la construcción y pueden ofrecer condiciones óptimas para el desarrollo de la vida vegetal que pensamos colocar.
Uno de los principales inconvenientes que plantea este peculiar método de cultivo, es la inexistencia de suelo natural donde se arraiga las raíces de las plantas a colocar; ya que la mayoría de estas superficies son de cemento, madera o piedra.
Ante esta situación, ha de hacer su propio sustrato de manera artificial del modo más exacto reproduciendo sus características naturales y nos obligara a tratar con fertilizantes ecológicos para así conseguir el éxito y desarrollo de cada una de las especies que van a ser plantadas.
Los recipientes más empleados tradicionalmente para el diseño de jardines de este tipo, son: macetas, tiestos, jardineras convencionales, etc. Pero si su imaginación es muy volátil puede generar diseños con cualquier otro elemento.
Mini Jardín y el entorno
Siempre tiene que haber un estrecho vínculo con la atmósfera, que les proporcione aire, agua y sol; elementos necesarios para la proliferación de la vida en la localización del jardín con el entorno. Siempre buscando favorecer la floración que es tan difícil de conseguir en los ambientes saturados de paredes, habitaciones, elementos, etc
